Así como nosotros, nuestro felino también puede experimentar episodios de ansiedad y estrés que no puede manejar, muchas veces no damos atención especial a ciertas conductas que pueden estar asociadas a este trastorno, a continuación compartimos algunos síntomas a identificar con urgencia:
- Si realiza sus necesidades fuera del arenero o en lugares no habituales de la casa.
- Identifica conductas compulsivas o estereotipias, así como acicalarse de manera excesiva o contraer los músculos de la espalda.
- Puede llegar a mostrar comportamientos violentos y excesivos de forma repentina.
- Sus hábitos alimenticios y apetito puede verse afectado, puede dejar de comer del todo o comenzar a ingerir cosas extrañas como plástico o tela.
- Puede marcar con la orina o las uñas más de la habitual.
- Puede mostrar expresiones como abrir la boca de manera exagerada y continua o maullar sin razón.
Es importante hacer una autocrítica sobre el tiempo que le estamos dando a nuestro gato, la calidad de su nutrición e higiene y si le damos las herramientas necesarias dentro de casa, como un rascador, por ejemplo.